Revancha tomada

Boca por fin pudo tomarse revancha de Quimsa. Luego de tres temporadas anteriores con éxitos del santiagueño en fases cruciales, el xeneize dio el paso al frente para llegar a una definición pero dejando atrás a Quimsa, algo que no había podido hacer anteriormente. Tanto en la temporada 20-21, 21-22 y la 22-23, la fusión se impuso en una semifinal y una final. Para Boca eso ya quedó atrás.

En la temporada 20-21, Boca finalizó en la cuarta ubicación de la etapa regular. Cerró con una marca de 25 - 13 aunque cayó en las dos últimas presentaciones perdiendo su chance de podio en la competencia. Se repartió triunfos ante Quimsa en dicha etapa regular (cayó como visitante 73 - 64, y ganó como local 76 - 74).

Un equipo con aspiraciones y la ilusión de meterse en la conversación. Contó con De Los Santos, Schattmann y Boccia como su eje central, además de Aguerre y Miller cerca del poste además de Buendía y Leiva sumado a juveniles que le daban ciertos minutos.

El xeneize logró llegar a semifinales en el formato de series al mejor de tres partidos. Se impuso ante Gimnasia CR 2-0 tras ganar 79 - 70 de local y 78 - 70 como visitante. Logró su pasaje a semis ¿Rival? Quimsa. El santiagueño logró imponerse ante Boca 2-0 tras ganar 85 - 78 de local y luego superar al xeneize 82 - 73 en Buenos Aires.

En la temporada 21-22, Boca terminó quinto en la fase regular con una marca de 23-15 dentro de una paridad notable y arrastrando cuatro victorias consecutivas para finalmente escalar posiciones. En la etapa regular, perdió ambos partidos ante Quimsa (91 - 84 como visitante y 75 - 67 como local), siendo el santiagueño el mejor de la fase más extensa.

El xeneize tenía grandes aspiraciones dentro de un elenco conformado por Schattmann, Vargas, Aguerre, Vildoza (Leandro), Hernández, Boccia y Buendía. Boca logró su acceso a semis tras vencer con desventaja de campo a Peñarol 3-1 luego de ganar en ambos juegos fuera de casa y llegar con enorme confianza a las semis. ¿El rival? Quimsa.

En dicha semifinal, Quimsa impuso su jerarquía y no dudó en cerrar la serie en cuatro partidos. Ganó 92 - 82 el primero en Santiago del Estero, dominó en el segundo 82 - 66, Boca supo descontar por un agónico 79 - 77, aunque la fusión se impuso con autoridad 92 - 75 logrando su acceso a la final. Misma historia que en la pasada temporada.

En la temporada 22-23, Boca insistió, terminó quinto en la fase regular con una marca de 23-15 con una remontada magnífica en la competencia. Cuatro victorias seguidas y ganando 8 de los últimos 10 para acomodarse en la tabla. Ante Quimsa también se repartieron victorias en sus localías. El xeneize ganó inicialmente 86 - 79, y cayó como visitante 88 - 71.

Un plantel xeneize que contaba aún con mayor excelencia en su roster. Desde las presencias de Balbi y Mata, sumado a Schattmann y Tucker junto a la vuelta de Mainoldi y el buen poderío cerca del aro con Barber y Traylor. Además de U23 y juveniles para extender el plantel.

En playoffs Boca se impuso en partidos claves. Primero venció a Oberá con desventaja de campo 3-0 manteniendo su fantástico envión. Luego chocó ante Instituto, también con desventaja en una serie impactante. Boca remontó un 0-2, ganó ambos duelos en casa de manera épica y mejor aún el Juego 5 que se lo llevó en un increíble final 75 - 72. ¿La final? Ante Quimsa. Si bien Boca sorprendió en el segundo partido (ganó 75 - 72 en Santiago), perdió ambos de local y la fusión goleó en casa 77 - 51.

¿Qué pasó en la temporada 23-24? Boca se tomó revancha y se sacó la enorme mochila que traía puesta respecto a las series definitivas ante Quimsa. Ya puede respirar, sentirse aliviado y buscar el campeonato.

José Fiebig

@josefiebig