La semifinal entre Boca y Gimnasia de Comodoro tiene su segundo juego esta noche desde las 21. El xeneize lidera la serie por 1-0. Fernando Duró apuesta a que a partir de ahora pese el cansancio en el equipo sureño.
Autor:Pablo Tosal (ptosal@pickandroll.com.ar)
Con la tranquilidad de empezar con el pie derecho la serie Boca apuesta a todo ganador esta noche en el estadio de Obras donde recibirá nuevamente a Gimnasia de Comodoro Rivadavia.
El técnico del local Fernando Duró, sabe que en la rotación de su banco de suplente está la clave para desarmar físicamente a su oponente. Claro está que con el correr de los partidos sabe que existen diferencia entre los supuestos titulares y suplentes.
Boca ha demostrado a lo largo del play off con Quilmes y el primer juego con Gimnasia que se terminó el equipo de 10 jugadores, para darle paso al equipo de 8, adecuándose un poco más a la realidad.
A saber, Juan Sartorelli (tiene 20 años) fue el primer gran filtro. El base sustituto de Matías Ibarra (22 años) tuvo un promedio de 17 minutos en la serie regular, mientras que por cuartos de final frente a Quilmes promedió once, bajando progresivamente el tiempo en cancha. Además contra el cervecero sumó en cuatro partidos apenas 2 puntos con 0/8 en triples.
En el primer partido de la serie contra el verde sureño, aunque terminó por una gran diferencia, se definió sobre el final, y Sartorelli apenas sumó 4 minutos y 20 segundos. El resto del tiempo la base la llevó siempre Ibarra.
Otro de los que resignarán minutos de aquí en más será el extranjero Reginald Fox, quien contra Gimnasia apenas estuvo 6 minutos 45 segundos en cancha, mientras que su promedio era un poco más del doble.
Es que el técnico de Boca sabe que las respuestas no son iguales. Es el caso también de los internos. Ruperto Herrera, en al rotación desde el banco o saliendo como titular sumaba 20 minutos de promedio. En la serie contra Quilmes bajó a 11 minutos de promedio y en el primero de la serie de semifinal jugó 12 minutos.
Es decir, el valor anímico de la instancia cambió, y la respuesta de los jugadores también. Ante juegos cerrados, la postura del entrenador fue darle confianza a quien mejor absorben la presión, por tal motivo, Ibarra, Cocha, Gabini, Prego y Leiva incrementaron sus minutos en campo.
Pero dentro de lo poco o mucho que los jugadores de Boca puedan estar dentro del campo, es siempre más beneficioso para el equipo a que no tengan ninguna rotación, como ocurre con Stan Easterling (35 años) y Jervaughn Scales (34) quien se tiene que bancar casi los 40 minutos de juego por partido.
La diferencia de edad y minutos en campo a medida que transcurra la serie favorecerá cada vez más a Boca, quien instrumentando cambios defensivos y presiones desgastará a las dos armas principales de Gimnasia.
Enrique Tolcachier sabe que la defensa es su principal aliado, y sobre todo que Eloy Martín y Lucas Saúl impongan el ritmo necesario para dominar los tiempos de juego. Asegurar un feliz retorno a defensa y descansar en ataque con al pelota serán algunas de las claves.