Ben Hur sigue de capa caída y no levanta. El elenco rafaelino, jugando ante su público, cayó ante Bahía Blanca Estudiantes por 91-78 y llegó a la 14ta derrota consecutiva. Sionista hizo un gran partido y en el Luís Conde festejó por 89-76 sobre Boca Juniors.
Es muy difícil poder explicar el duro momento de Ben Hur, que empieza bien los partidos pero los termina muy mal. Anoche jugó un interesante primer tiempo ante Bahía Blanca Estudiantes, donde defendió bien y atacó con inteligencia con Calvelli y Watson como estandartes.
Logró irse al descanso ganancioso pero en el segundo tiempo, los de Seguí fueron otros y la visita lo apabulló para quedarse con la victoria por 91 a 78 y propinarle a los rafaelinos la derrota número 14 de manera consecutiva.
Como suele ocurrir, lo mejor que mostró Ben Hur ocurrió en los primeros 20´ de juego. Jugó al límite y marcó con presión en todos los sectores del rectángulo de juego, tal cual lo pretende Seguí. En ataque jugó con cierto orden y efectividad y en defensa se las rebuscaba para controlar los embates de la visita. Por eso, el local se fue ganando al entretiempo 48 a 44.
Pero en la reanudación, la historia volvió a ser otra. También, como viene ocurriendo en las últimas fechas, la BH volvió a defeccionar en el tercer cuarto y el rival lo aprovechó para sacar una diferencia amplia que luego comenzó a ser indescontable para los rafaelinos.
Los bahienses sacaron 10 de margen en el inicio del último cuarto y en los primeros 2´ de juego la ventaja llegó a ser de 21, con lo cual ahí se terminó el partido. Aunque después se achicó un poco la brecha, el último cuarto estuvo prácticamente de más. Ben Hur no logra cortar la racha de derrotas y la tan anhelada victoria se hace esperar. Por lo pronto, mañana será el turno de enfrentar en casa a Quimsa y ver si se puede volver a sonreír después de mucho tiempo.
Síntesis
Ben Hur (78): Machuca 6, Calvelli 8, Watson 22, Storani 4 y Cabello 8 (FI), Tiago 10, Ortiz 6, Hillebrand 5 y Cavagna 9. DT: Horacio Seguí.
Bahía Blanca Estudiantes (91): Cangelosi 20, Rivero 14, Levy 6, Franco 9 y Nelson 18 (FI), La Bella 8, Cecchi 2, Bianco 2, Monroe 10 y Barrera 2. DT: Marcelo Richotti.
Parciales: 23-19; 48-44 y 62-72. Árbitros: Diego Rougier y Oscar Martinetto. Estadio: Coliseo del Sur Nota: Diario La Opinión Foto: Gentileza Diario Castellanos
Con total justeza
Fue superior durante todo el partido y logró su primer objetivo del fin de semana en forma merecida y contundente.
El Centro Juventud Sionista derrotó con claridad, de visitante, a Boca Juniors por 89 a 76. Los dirigidos por Sebastián Svetliza tuvieron un excelente rendimiento en el aspecto individual y en el juego en equipo.
Desde el comienzo Sionista fue más y con concentración defensiva hizo que su rival recién conquistará los dos primeros puntos a más de tres minutos de juego. Aunque en el primer cuarto -con Juan Espil encendido- el local reaccionó y pasó al frente, el equipo paranaense no aflojó y se fue en ganancia por 2 (18 a 20).
El mejor juego en conjunto de los visitantes recién se reflejó en el marcador casi en el cierre del primer tiempo. Boca se mantuvo en partido gracias a su efectividad desde los 6m25 y las apariciones de Espil. Los 6 puntos de distancia a favor de la visita eran pocos de acuerdo a lo observado en el trámite.
Aunque en el tercer cuarto se arrimó peligrosamente el dueño de casa, Sionista nunca renunció a su estilo de juego y con duras defensas y tranquilidad en ataque retomó el control del cotejo.
La superioridad esgrimida en los 30 minutos disputados, finalmente y paulatinamente se trasladó al tanteador. Fue así, que en los 10 decisivos Sionista apabulló a un adversario que buscó sin éxito la hazaña y con el único recurso de tener a Espil en cancha. Los de la capital entrerriana nunca perdieron la línea y con concentración defensiva y ofensivas claras cerraron con anticipación el pleito que lo tuvo como amplio dominador y protagonista.
Síntesis
Boca Juniors (76): Aguirre 16, Espil 29, Edward 2, Calvi 10 y Alston 3 (FI), Sánchez 9, Fernández 2, Masieri 3 y Orellano 2. DT: Fernando Duró