Schenone: “Voy a trabajar muy fuerte sobre todo lo que sea social”

A simple vista parece un cambio de época. Un quiebre. Pero él lo siente como una continuidad, matizada por su sello personal y enmarcada en el trabajo de un equipo.

Lo cierto es que Luis Schenone, reconocido empresario del canal Showsport y dirigente de Atenas desde hace años, asumirá hoy la presidencia del Griego, en reemplazo de Felipe Lábaque, histórico directivo verde que cederá el sillón mayor pero seguirá muy vinculado a las decisiones de peso.

“Es una enorme alegría y un enorme desafío también. Hace 15 años que soy parte de Atenas, pero llegar a ser presidente del club de básquet más grande de Argentina es un orgullo bárbaro. Estamos trabajando con un equipo muy compacto de dirigentes hace cuatro años y eso te da una tranquilidad de que no es un cambio traumático, sino una continuidad”, plantea Schenone.

–Por cómo lo plantearon, es un enroque de piezas y no una ruptura.
–En la comisión somos 25 personas y cuatro o cinco trabajamos en la gestión diaria. El resto nos acompaña en lo macro, pero entre esos cuatro o cinco llevamos la estrategia a largo plazo. Por una cuestión estatutaria, “Felo” (Lábaque) no podía seguir siendo presidente y me propusieron a mí. Lo aprobó toda la directiva. Hay gente con muchos años en el club y que aprobaran por unanimidad mi postulación es un orgullo grandísimo. Somos una familia y, entre todos, vamos a tratar de poner a Atenas de nuevo arriba.

–¿Cuáles son los fundamentos para que se diera ese consenso?
–Hace 15 años que estoy junto al club. Y siempre respeté los roles. Aun cuando no era miembro de comisión, me enteraba de cosas pero siempre respeté ese “off the record” (por sus funciones en los contenidos de Showsport). Y en la gestión, traté de hacer innovaciones y traer ideas que pudieran acrecentar el prestigio o aumentar los ingresos. Creo que esa inquietud constante de aplicar los negocios al club, y generar otras actividades y movilizarlo, hizo que me miraran como una persona que no sólo era un dirigente deportivo, sino alguien más amplio en la gestión de negocios. También traje innovaciones: la pantalla gigante durante las finales con Peñarol fue la primera en la Liga y jugar en el Orfeo también fue una gran novedad. Todas esas inquietudes que fuimos compatibilizando y la afinidad que tenemos con “Felo”, con quien nos conocemos hace 17 ó 18 años, hizo que el resto pensara que yo era el mejor recambio.

–Si bien son un equipo, ¿qué sello personal pensás dejar en tu gestión?
–Voy a trabajar muy fuerte sobre todo lo que sea social y todo lo que se refiera al marketing, no sólo con los auspiciantes, sino con toda la comunidad cordobesa. Queremos que puedan ir a la cancha escuelas municipales, provinciales, del interior. Más allá de los vaivenes económicos del país, en cuanto a esponsoreo tenemos bastante armado el presupuesto, así que mi función principal va a ser generar cosas “hacia afuera”. Por ejemplo, queremos armar peñas en el interior. Hay que hacer que Atenas esté en toda la provincia. Y permitir que mucha gente que habitualmente no puede ver básquet, pueda ir a la cancha.

–¿El objetivo es aumentar la concurrencia al Cerutti?
–Exactamente. Por estadísticas, sabemos cuál es la capacidad que generalmente se ocupa. Y no tiene sentido tener una capacidad ociosa. Un porcentaje de esas entradas se van a destinar a fines sociales.

–En lo basquetbolístico, todos conocemos la influencia y el peso de Felipe Lábaque. ¿Cuál va a ser tu margen de maniobra?
–Cuando definimos el cambio de directiva, en el tema deportivo acordamos cómo íbamos a trabajar. Yo no soy experto en básquet y cumpliría una mala función si me hiciera cargo de algo que no conozco profundamente. Opino las estrategias del negocio o el presupuesto, pero confío mucho en “Felo”, que tiene 50 años en el básquet. Sí voy a aportar en todo lo que sea en la gestión del equipo. Con “Felo” nos vamos a ayudar enormemente. También se planteó una decisión estratégica en lo deportivo: el 80 por ciento del plantel tiene contrato por dos años, para no empezar de nuevo el año que viene y entrar en la discusión sórdida de contratos. Hemos visto al equipo muy enganchado y estamos muy esperanzados. Estamos pensando nuevamente en el Orfeo, así que ojalá lleguemos a una final.

–Los máximos dirigentes de Atenas siempre venían del básquet. Que llegues a la presidencia, ¿es un cambio de época, una adaptación a un nuevo mundo para los clubes?
–No, yo lo veo como una continuidad. Quizá se esté dando que los dirigentes deportivos se tratan de complementar con las personas que estamos en el ámbito de las comunicaciones o los negocios. No sólo Atenas, sino en los clubes de fútbol. En Atenas, la gestión estuvo siempre, porque en la cabeza del “Felo” esa capacidad comercial siempre existió. Lo que vamos a tener ahora es tal vez una visión más amplia. Es la primera vez que Atenas tiene un presidente que no es del palo deportivo, que no jugó al básquet y desde ese punto de vista puede ser una experiencia distinta. Pero es una continuidad. Estoy contento y se vienen buenos tiempos.


Foto: Gentileza Germán Ruiz.
Gabriel Rosenbaun - MundoD.