La aplanadora rojinegra

El comienzo del juego fue pobre. Friccionado, de poca eficacia pero mucho ritmo. San Martín de a poco se fue acomodando mejor y sacó una pequeña brecha (8-3) en los primeros cinco minutos. La defensa sobre Schattmann y De Los Santos fue muy buena, obligándolos a desprenderse del balón mientras que del otro lado Wood y García se encontraron mutuamente.

Un minuto de Gonzalo García y la salida a la cancha del banco patagónico no modificó mucho la situación. Con el cubano Reynaldo García enchufado (9 en el cuarto), San Martín no aflojó atrás y siguió construyendo la diferencia. Gimnasia no encontró respuestas a pesar que utilizó toda su rotación habitual (flojo 2/8 en triples) y una seguidilla final de Mainoldi selló un primer periodo perfecto para el local que metió un 10-13 en dobles para cerrar 23-8.

Gimnasia abrió el segundo segmento con un triple de De Los Santos pero con dos corridas San Martín otra vez sacó terreno (28-11). El partido perdió nivel, se hizo más cortado y ambos equipos entraron en penalización tras apenas tres minutos. Eso ayudó a Gimnasia, que con su circuito de juego anulado, encontró seis puntos consecutivos en la línea. Pero nada más que eso. La defensa de San Martín fue la que marcó el ritmo y con una bandeja en cancha abierta de Faggiano y un triple del bahiense sacó veinte (37-17).

Sin el tiro de tres puntos, el elenco comodorense buscó otros caminos sin suerte. Vargas perdió mucho más de lo que ganó ante Wood, Romero sólo anotó desde la línea y Shaw pasó desapercibido. No hubo más. Para el cierre del segundo cuarto ya estaban en cancha Estefano Sismondi, Lucas González y Axel Mendez en cancha. Con una superioridad absoluta, San Martin arrasó en el primer tiempo por 50-22.

Era de esperar una reacción de Gimnasia tras tan floja perfomance. Y si bien existió, con algunas acciones positivas, más energía y ritmo para un pequeño parcial 9-3, no cambió el panorama general. San Martín continuó dominando a partir de su defensa, sumó con Mainoldi y un par de técnicas a Gonzalo García y Juan Manuel Rivero a mitad del segmento fueron definitivas para Gimnasia, que bajó los brazos definitivamente. (63-31).

Con la ventaja rondando los treinta puntos, el partido siguió el mismo curso el resto del segmento. Aguerre aprovechó para anotar (y mostrar) recursos de espaldas al canasto, Gimnasia pudo anotar tiros abiertos pero el contexto era todo de San Martín que entró al último cuarto 71-44.

El segmento final, con la historia sellada hace rato, sirvió para que Vargas sume algunos minutos y se vaya acoplando a la estructura de Gonzalo García. El dominicano, dentro de un pobre contexto de su equipo, mostró poco. Gimnasia retrocedió el paso dado en el triunfo que le dio la clasificación ante Bahía Basket y se asemejó al equipo de las once caídas al hilo entre Liga Nacional y Sudamericana.

San Martín, por su parte, brilló ante su público y fue sumamente contundente, asimilando bien el mote de candidato junto a la responsabilidad de ser el organizador. Frente a San Lorenzo en la gran final, tendrá la chance de gloria que tanto busca.

Martín Segura - @Martin_Segura
Fotos: LNB Contenidos