Un cuarto de triunfo

Tibio, como sufriendo los coletazos de los 12 días sin partidos, con un mar de errores, así comenzó el juego entre Peñarol y Bahía quienes brindaron un mal primer cuarto. Y sobre todo Peñarol a quien le costó entrar en ritmo. En sus primeros tres avances perdió siempre la pelota. Inaudito.

Del otro lado, para no ser menos, Bahía respondía con la misma desprolijidad y también sumaba pérdidas, alimento de la defensa. Promediando el primer cuarto ganaba Peñarol 6-2 en un largo bostezo de 5 minutos.

Sebastián Ginóbili, técnico de la visita, movió rápido el banco buscando soluciones. Entraron Vaulet y Redivo pero nada pasó. Peñarol se hizo dueño del juego (11-4) con una gran dinámica de Alejandro Konsztadt atrás y adelante. Pero Bahía ajustó su defensa del juego interior, se puso mejor con la circulación de balón y empató en 11 sin forzar tanto los tiros.

El primer cuarto se lo llevó el local por un magro 13-11 y con Bahía tirando 1/6 en triples, siendo Peñarol el equipo más ordenado. Pero de movida en el segundo segmento el equipo de Fernando Rivero tomó una diferencia que se fue ampliando merced a la buena respuesta de su banco de relevos.

Gabriel Fernández, Ale Diez y Fabián Sahdi llegaron con soluciones ofensivas y forzando menos de lo que venía mostrando el equipo en el pasaje inicial. No dependió del tiro de tres puntos para sacar una ventaja que se marcó en 15 puntos (30-15). El dominio ya era evidente, habiendo controlado las cinco perdidas del comienzo.

Bahía Basket perdió el plan de juego. Metió una rotación frenética para tratar de encontrar soluciones y se mareó, perdió el foco, abuso del dribling y del tiro exterior. El equipo bahiense estaba patas para arriba pero un rato de buena defensa lo tranquilizó y sin mucho descontó 36-25 al cierre del primer tiempo con 12/38 en tiros de campo.

Muchas veces no se trata de las formas sino de la ejecución. Peñarol tomaba el control del juego y erraba (entre ellos Boccia, Konsztadt o Leo Gutiérrez) tiros normalmente asequibles, pero lo mismo le pasaba a Bahía que encontró muchas oportunidades ofensivas malogradas por propia impericia. Lo bueno del primer tiempo fue que terminó.

El segundo tiempo fue mejor en todo sentido y hubo un segmento para cada uno. El tercer cuarto le favoreció a Bahía Basket consiguiendo el gol que necesitaba. Whelan desde la base, Levy y Rasio como descargas, las penetraciones de Byro que fue a la línea de libres pero sobre todo Trevor Gaskins que se erigió como escolta anotador (10 pts) llevaron el juego a una igualdad.

Bahía primero empató en 47 y luego en 55 cuando parecía que Peñarol reaccionaba y se quedaba con el tercer cuarto. Fue 30-19 el parcial metiendo todo en un cono de incertidumbre. Tulo Rivero bancó mucho el equipo titular con el único cambio de Sahdi por Konsztadt. A pesar de ser un equipo más alto y de mayor peso, Peñarol apostaba a sacar réditos de su defensa y juego de pases por sobre el vértigo que le estaba poniendo la visita.

Y aunque fue dominado en el tercer cuarto, la misma receta le salió bien en el tramo final. Así es el básquetbol, lo que parece que está mal, al final termina saliendo bien. Y fue un pleno absoluto del entrenador Rivero haber bancado a Sahdi al inicio del último cuarto cuando su baja performance amenazaba al reingreso de Konsztadt.

Sahdi abrió el último cuarto con dos triples seguidos que le devolvieron la sonrisa al equipo. Todo Peñarol lució con mucha más energía viniendo de un tercer cuarto muy apático. Boccia debió salir por un dolor en la zona más baja de su tobillo (mañana placa radiográfica) y Massarelli en su lugar hizo estragos.

El “milrayitas” metió los primeros seis avances seguidos del último cuarto: dos dobles y un triple de Massarelli, dos triples de Sahdi y un doble con falta de Gabriel Fernández. Fueron 16 puntos en menos de 4 minutos que liquidó el juego. La ventaja trepó vertiginosamente de un empate a 71-61 con todo dominado.

En un abrir y cerrar de ojos, ese partido pensando y luchado que Bahía venía llevando se le esfumó. Se descuidó y Peñarol se lo hizo pagar carísimo con aciertos y mucha voracidad ofensiva. Fabian Sahdi, aprovechando la oportunidad de la ausencia de Osimani, se hizo dueño de los tiempos ya con más tranquilidad y gobernó sin problemas los últimos cinco minutos del partido sin que Bahía amagara siquiera a poder dar vuelta el resultado.

Fue una buena victoria del “milrayitas” que comienza el camino de los play offs mostrando los mismos dientes afilados de siempre. Su instinto animal de saber cuando atacar y comer la presa. Bahía se descuidó un cuarto y lo pagó con la derrota. Para ganarle a Peñarol deberá hacer un partido completo o dejar atrás el sueño.

Síntesis
Peñarol (89): Alejandro Konsztadt 4, Franco Giorgetti 14, Adrián Boccia 10, Leonardo Gutiérrez 12 y Martín Leiva 10 (FI) Alejandro Diez 3, Luciano Massarelli 10, Gabriel Fernández 8, Fabián Sahdi 18. DT: Fernando Rivero.

Bahía Basket (72): Gastón Whelan 7, Trevor Gaskins 15, Mariano Byró 11, Lisandro Rasio 10 y Jamaal Levy (x) 6 (FI) Juan Pablo Vaulet 10, Ariel Ramos 0, Lucio Redivo 8, Ariel Eslava 2, Máximo Fjellerup 0, Martín Fernández 3. DT: Sebastián Ginóbili.

Parciales: 13-11, 36-25 y 55-55.
Árbitros: Daniel Rodrigo, Leonardo Mendoza y Cristian Salguero.
Estadio: Polideportivo Islas Malvinas.

Fotos: Majo Gil @MajoPick
Crónica: Pablo Tosal @pablotosal