Quilmes volvió a ganar en tiempo extra, llevando su racha a tres triunfos consecutivos por esta vía, y cinco en lo que va de la temporada. En una calurosa noche, superó como visitante a Bahía Basket por 99 a 93. Facundo Piñero, con triples claves, fue la figura del ganador.
Autor:Emanuel Niel (eniel@pickandroll.net)
La noche no inicio bien para ninguno de los dos equipos. Con imprecisiones, los primeros dos minutos pasaron sin pena ni gloria, en un mar de errores no forzados, y ofensivas desdibujadas y con premura en buscar el canasto sin una idea muy clara.
Con mayor serenidad, Quilmes fue bosquejando por donde iría su plan de trabajo. El balón en el poste apareció como primera opción, siendo Romero su referente (6 puntos) más saliente. Del otro lado, Bahía Basket se apoyó en el uno contra uno, aunque una buena defensa del pick and roll le coartó libertad de acción.
Las complicaciones del cervecero aparecieron en los momentos que el dueño de casa consiguió frenar su primera línea de juego, trabando el engranaje rival y de esa manera quitándole segundos de trabajo cerca del cilindro.
Allí el que apareció fue Baxley, quien a través de sus penetraciones le dio otra vía de gol a la escuadra orientada por Leandro Ramella, y a la postre sería el plus que metería a los suyos arriba al segundo capítulo, 20 a 17.
Nuevamente la desprolijidad se hizo presente en el arranque del segundo cuarto. Esta vez la variante fueron los relevos, los cuales tardaron en hacer pie dentro de cada estructura, y el que pagó los platos rotos fue el trámite del match.
Sin sobrarle nada, y recostándose sobre su juego perimetral, el visitante consiguió sacar seis tantos de luz (28-22) en el promedio del cuarto; distancia que ampliaría a siete a falta de 3:30 (30-23).
Para ese entonces el anfitrión se encontró en un mar de dudas, y entre tantas variantes planteadas, ninguna daba efecto. Por tal motivo Sebastián Ginóbili devolvió al campo a Gerbaudo en lugar de Whelan, y teniendo mayor preponderancia con el nuevo base en campo, las filas del “Sepo” tomaron otro color.
En una ráfaga los bahienses estamparon una marca de 5-0 en un minuto, para quedar distanciados por sólo dos unidades (28-30). Parecía que el local lo daba vuelta, pero el oportuno ingreso de Piñero no lo permitió.
El “faca” oxigenó la media cancha huésped, fuente de alimento durante todo el segundo capítulo para el cervecero. Un triple de él, seguido por otro de Maciel le devolvieron ocho de luz (36-28); brecha que pisaría los 11 a falta de un minuto (39-28), aunque sería de siete (40-33) al momento de encarar el descanso largo.
Con el retorno de la acción el cotejo vivió su mejor periodo hasta allí. Concentrados desde el primer minuto, ambos elencos entregaron un trámite parejo y sin grandes diferencias, donde costó encontrar figuras relevantes.
Al no poder quebrarlos ofensivamente, los locales ajustaron aún más su defensa para germinar desde ese costado del campo, el impulso suficiente para revertir la desventaja. Fue de esa forma que, doblando en el poste alto y esgrimiendo variantes en momentos puntuales, sobre todo cuando Baxley intentó ser solución, los anfitriones pudieron, a base de esfuerzo, pasar a comandar las acciones, al menos por unos instantes.
Con Gerbaudo como punta de lanza, el cuadro bahiense se puso arriba 52-51 a falta de 3 minutos; aunque luego, y rotando bien el balón, Quilmes lograría volver a colocarse al frente hasta cerrar ese periodo.
Ramella ingresó en la rotación a Gallizi, y de esa forma el cervecero le dio descanso a Romero y recuperó el faro en el poste bajo, además de una potencial fuente de rebotes. Un triple de Gerbaudo sobre el cierre dejó las acciones distanciadas por sólo una unidad, 58-59, con 10 minutos aún por delante.
El tricolor picó en punta en el arranque del último cuarto. A través del foráneo Baxley, llegó a sacar cinco puntos de luz (61-66) en los primeros tres minutos; aunque rápidamente los celestes acortaron a uno.
En total, de allí al cierre, el cotejo se equiparó en cinco oportunidades (68, 70, 72, 74 y 81). El equipo de Bahía Blanca lo tuvo para ganar, estando arriba por cinco (81-76) a falta de 1:10, pero un triple de Piñero le devolvió las esperanzas al huésped.
Más tarde, y desde la línea, Baxley equiparo el tanteador a falta de 18.2. El local se jugó la última bola en las manos de Gerbaudo, y su rival, buscó defender. Al base le costó, pero finalmente logró penetrar por eje de cancha, aunque al momento de lanzar recibió una tapa, y con ella, expiró el tiempo regular.
Los libres y la perseverancia de Piñero fueron las claves del suplementario. Si bien Bahía Basket sacó seis tantos de luz en los primeros dos minutos (88-82), no pudo con defensa mantener la diferencia que no logró seguir ampliando.
Primero un triple de Sahdi, y luego, uno de Piñero, dejaron el marcador equiparado en 90, con 1:20 por delante, y un panorama totalmente nuevo por delante. El local fue más ganas que básquet en ataque, y en contra partida, con paciencia y pase extra, el huésped pareció tomar las riendas del match.
Gerbaudo fue a la línea y no sumó; del otro lado el “faca” acertó otro tiro de valoración triple (90-93), y completando la escena Rasio también erró sus dos lanzamientos simples. La buena para el local fue que se quedó con ese rebote, y de la galera Nocedal concretó el triple que devolvió la igualdad en el marcador a falta de 36 segundos.
Fue el momento de Quilmes en la línea, y el cuadro marplatense no falló. Marín convirtió ambos; en la posesión siguiente Gerbaudo hizo falta en ataque (su quinta), y en la reposición, Whelan cortó bruscamente (también quinta) a Sahdi, siendo sancionada como antideportiva.
El base del equipo de la “feliz” convirtió los dos (93-97), y cuando volvió el juego, fue Rasio quien le cometió infracción a Piñero, el cual, con su dos de dos, sentenció el marcador. Quinto suplementario para Quilmes; el tercero de forma consecutiva, y quinta victoria en esa condición. Parece que el cervecero le tomó la mano a jugar más de 40 minutos por noche.
Síntesis Bahía Basket (81) (93): Diego Gerbaudo 12 (X), Matías Nocedal 16 (X), Franco Amigo 5, Ivory Clark 12 y Lisandro Rasio 22 (inicial); Gastón Whelan 14 (X), Gonzalo Martínez 4, Maurice McNeil 3, Mateo Gaynor 2, Agustín Ambrosino 0 y Lucio Redivo 3. DT: Sebastián Ginóbili.
Quilmes (81) (99): Fabián Sahdi 7, Federico Marín 16, Clay Baxley 26, Mario Ghersetti 2 y Diego Romero 12 (inicial); Luca Vildoza 3, Maximiliano Maciel 12, Facundo Piñero 21 y Tayavek Gallizi 0. DT: Leandro Ramella.