La Unión de Formosa sufrió una amplia y muy dura derrota ante Bahía Basket por 89 a 69. El equipo de Gabriel Piccato quedó expuesto ante sus limitaciones con una tarea de conjunto no fue buena. Bahía lo sentenció en el complemento.
Autor:Pablo Tosal (ptosal@pickandroll.net)
Es que venía de hacer frente a sus problemas de lesiones en la derrota ante Quilmes y ahora ante los bahienses, después de lo que había mostrado el lunes, tenía posibilidades de ganar. De hecho eso se vio en buena parte del primer tiempo. Pero desde que cayeron las bombas de tres puntos de Matías Nocedal en el tercer cuarto y el elenco de Sebastián Ginóbili estiró las cifras, nunca más tuvo retorno y así perdió de una manera lapidaria siendo demolidos por Bahía y mostrando también quedar demolidos desde lo anímico al no tener capacidad de respuesta.
Lisandro Rasio fue el máximo anotador del ganador con 18, en un equipo bahiense donde los once jugadores que tuvieron acción, anotaron puntos. En el local, de nuevo Justin Keenan contra todos con 26 puntos.
La noche largó tan equilibrada que habían pasado 7 minutos de básquet y las cifras mostraban un 13 de cada lado. Con un primer dato para darle vida a la preocupación en La Unión que no daba garantías para dominar el rebote en su tablero. Bahía lastimó y mucho con Rasio -12 en el capítulo- mientras que los de Piccato encontraron muy bien a Ariel Zago -7-. A lo del pivote se sumó Keenan -8- y entonces La Unión terminó arriba en el capítulo por 21 a 17.
En el arranque del segundo el local no pudo solidificar lo que insinuaba el juego. No pudo ensanchar la brecha y Bahía se puso al frente con un gran aporte del banco -7 de Agustín Ambrosino y 6 de Lucio Redivo- para no abandonar nunca más el control de las cifras. En La Unión se confirmaban sus dramas para atacar el aro solo encontrando a Keenan -10 en la fracción-, claro que su principal problema estuvo del otro lado de la cancha donde siguió dando segundas opciones y así recibió 28 puntos para verse abajo al final del primer tiempo por 45 a 40.
El segundo tiempo fue lapidario. Lo ganó Bahía 44 a 29 y así se llevó el triunfo. Y en realidad no hay mucho para describir porque desde el momento en que La Unión fue a la zona, se encontró con la mano de Nocedal –sin puntos hasta ese momento- que con tres triples casi consecutivos cambió el perfil de ese partido equilibrado que se había observado. De ahí en más pasó a ser absolutamente de Bahía. Como si faltaran problemas el local ya no contó con Zago por una molestia en su mano derecha. Mientras que enfrente las manos de los bahienses seguían picantes con más triples de Diego Gerbaudo, Franco Amigo e Ivory Clark. De las 7 anotaciones de Bahía en el tercer cuarto, 6 fueron triples. Entonces las distancias se agrandaron y con unos pocos minutos del último cuarto todo quedó a placer del visitante. Pasó la barrera de los 20 puntos –la máxima fue de 24, 78 a 54,- y La Unión hizo el resto. Perdiendo balones ante mínima oposición, sin la contracción defensiva que el momento pedía y envuelto en el desconcierto completo donde se incluyeron un par de faltas antideportivas de esas que llegan cuando el jugador no quiere más. Así Bahía se llevó un triunfo de mucho valor. La Unión, una de las derrotas –si no es “la” derrota- más dura de la temporada que obviamente estuvo mucho más allá de los problemas que este equipo arrastra con las bajas de Nicolás Gianella y Timothy Pickett.
Síntesis: La Unión de Formosa (69): Sergio Mora 2, Alejo Montes 6, Luciano González 15, Justin Keenan 26 y Ariel Zago 9 (FI); Franco Prelazzi 0, Damián Pineda 6 y Javier Cáceres 5. DT: Gabriel Piccato.
Bahía Basket (89): Diego Gerbaudo 9, Franco Amigo 9, Matías Nocedal 13, Ivory Clark 9 y Lisandro Rasio 18 (FI); Lucio Redivo 9, Gastón Whelan 4, Rashad Wright 2, Mateo Gaynor 5, Agustín Ambrosino 9 y Gonzalo Martínez 2. DT: Sebastián Ginóbili.
Arbitros: Diego Rougier y Jorge Chávez. Parciales: 21-17, 40-45 y 52-65. Detalle por cuartos: 21-17, 19-28, 12-20 y 17-24.