Lanús volvió al triunfo con su victoria ante Bahía Basket
A pesar de la ausencias, Lanús cortó la sequía al conseguir una buena victoria, como local, ante Bahía Basket por 78-72, en un cotejo valido por la 13era fecha de la Zona Sur.
El ‘Granate’ logró frenar la seguidilla de cuatro derrotas consecutivas y sumó su tercer triunfo en la temporada. Por su parte, los bahienses cosechó la quinta caída en estadios ajenos.
En el plano individual se destacó Julio Mázzaro con 17 puntos (4/5 en dobles, 1/5 en triples y 6/6 en libres), además del aporte de Ariel Eslava con 13 unidades y 5 rebotes. Por su parte, en el perdedor sobresalió Lisandro Rasio con 19 tantos (1/3 en triples, 6/10 en dobles, 4/5 en libres) y 13 rebotes.
La historia arrancó positiva para Lanús, que exhibió alta efectividad para despegarse 6-0, a los 2 minutos, con Lytch (6) como guía. No obstante, ambos equipos desplegaron defensas livianas, que otorgaron muchas licencias, por eso el trámite se tiñó con desorden. La visita equiparó con Blakeney (4) y Nocedal (4) para empatar en 10, a falta de 4 minutos. La paridad se mantuvo hasta el cierre, con serias dificultades de los dos equipos para construir y se bajó la persiana 15-15.
En el segundo capítulo se profundizó esa tónica de juego errático y desprolijo. En 5 minutos el tablero apenas se movió 21-16, lo que demostraba la baja calidad. En el parquet se ausentó la puntería y paciencia para elaborar en el juego estacionado y reinaron los errores y pérdidas. Sin mucho para destacar, el entretiempo llegó con Lanús en ganancia 29-27, con 37% de cancha para el local y 41% para la visita.
Tras las charlas en vestuarios, el encuentro ganó en dinamismo, ya que ambos elencos ejecutaron con mayor intensidad sus movimientos, tantos en ataque como en defensa. No obstante, permanecieron las discontinuidades en las performances. Lanús halló el bálsamo de la gravitación de Mázzaro (10), quien facturó con sus recursos para tomar una brecha 45-38, a falta de 4 minutos. Por su parte, Weber dependió casi exclusivamente del aporte de Rasio (8), para maquillar un segmento adverso. El cuarto finalizó con el local arriba 54-48.
El último capítulo inició con la máxima del partido, 59-48 para Lanús, en los albores del chico. Empero, el elenco bahiense reaccionó con Rasio y usufructuó las desconcentraciones de la defensa rival, para estampar un pasaje 9-2 y acechar 61-57, a los 3 minutos, lo que obligó al tiempo muerto de Volcan Sánchez. A la salida de ese parate, el ´Granate´recuperó la ventaja 64-57, pero la defensa 4-1 sobre Mázzaro (7) le complicó las ofensivas. Rasio (7) siguió imparable con la carga de rebotes y su potencia, además de la productividad de Gerbaudo (8), por eso el tablero marcó 69-67 para el local, con 2 minutos por jugar. En ese momento crítico apareció Salles (5) con una bomba para respirar y desde ahí manejar el trámite con los libres. Lanús festejó en un partido de vuelo chato, pero que le sirvió para recuperar la sonrisa.
