Bahía Estudiantes comenzó su pretemporada 2012-13 este lunes en doble turno. Por la mañana el plantel realizó trabajo de gimnasio y por la tarde continuó con actividad física en el club de golf, a las órdenes del preparador físico Cristian Llambrecht. En este infome la palabra del DT Pablo Coleffi.
Antes de comenzar los trabajos físicos por la tarde, el plantel conducido por Pablo Coleffi atendió a todos los medios de prensa que se acercaron.
Pepe Sánchez, Lucas Faggiano, Juan Manuel Rivero, Federico Ferrini, Víctor Baldo y Juan Manuel Torres fueron las seis fichas mayores del equipo presentes.
Por otro lado, también participaron de la práctica los juveniles Mauro Miéres, Gonzalo Torres y Lucio Redivo.
“El inicio de una pretemporada siempre es el inicio de una ilusión y hoy la comenzamos. No hay motivo para preocuparse con las fichas que faltan, sólo hay que esperar un poco más para cerrar los dos extranjeros restantes. Hay que hacer un diagnóstico del equipo en este tiempo de trabajo para después ver exactamente lo que necesitamos. Seguramente vamos a apostar a un anotador perimetral y un interno para completar el plantel”, señaló Pablo Coleffi, entrenador de Bahía Estudiantes.
El equipo, que entrenó por espacio de una hora y media en el club de golf, tendrá la mañana del martes libre y entrenará desde las 19 en el Club Argentino.
“En las primeras dos semanas, haremos mucho hincapié en la parte física. Inmediatamente pasaremos a trabajar con pelota, pero el énfasis está puesto en la parte aeróbica. Una vez que los chicos tomen un poco de ritmo pasaremos a hacer entrenamientos de básquetbol puro”, agregó el entrenador.
Jonathan Durley, la única ficha extranjera cerrada al momento, se incorporará a Bahía Basket el 23 de agosto y estará presente para jugar el amistoso ante Peñarol del venidero 5 de septiembre en el Casanova, como parte de la Fiesta Nacional del básquetbol.
COLEFFI: “TENEMOS QUE TENER CONCIENCIA DE NUESTRAS DEBILIDADES” Pablo Coleffi, quien volverá a dirigir un equipo de Liga Nacional tras doce años fuera de la competencia doméstica, sabe que necesitará un equipo inteligente de cara a la temporada 2012-13 que será, a priori, una de las más competitivas de la historia.
“Tenemos que tener conciencia de nuestras debilidades, y quizás la más importante es que no tenemos un jugador determinante. Por lo tanto, tenemos que pensar en jugar con idea de conjunto, logrando química entre nosotros y optimizando nuestras fortalezas, que seguramente van a ser muchas. Además, tenemos que contagiar fuera de la cancha lo que este conjunto transmita, que va a ser energía, esfuerzo, solidaridad, optimismo, porque sabemos que nuestro principal impulso va a ser la gente”, señaló.
´Pocha´, entrenador bahiense, llega a la organización con metas deportivas y estructurales, en lo que será el tercer año del proyecto encabezado por Pepe Sánchez.
“Aquí hay gente que está hace mucho más tiempo que yo, que empecé hace muy poco. De mi parte considero que tenemos que impulsar al equipo para conseguir una buena ubicación teniendo en cuenta el personal que tengamos. La Liga es larga y seguramente vamos a tener momentos buenos, algunos no tan buenos, pero confío que deportivamente vamos a dar un paso adelante. En cuanto a infraestructura y organización, creo que los pasos son positivos, porque se está remodelando el Casanova, hay propuestas innovadoras y nuevas cosas para mejorar el producto. Este grupo de trabajo no se quedó con lo ya logrado sino que está apuntando hacia algo más. El equipo dentro de la cancha debe estar en la misma sintonía”.
Por otro lado, Bahía Basket volverá a contar con Mauro Polla y Alejandro Montecchia como asistentes técnicos, y tendrá la novedad, en esta temporada, de Juan Espil como director deportivo.
“Me siento muy bien con el grupo de asistentes y colaboradores. Cada reunión es apasionante porque hablamos de básquetbol, del equipo, de los Juegos Olímpicos... acá los dirigentes también saben y discuten de igual a igual. Se vive un clima basquetbolístico neto. Hay muchas ganas porque cada uno en lo suyo está respetando su trabajo y fundamentalmente aprendiendo uno del otro. Hay una excelente convivencia profesional y eso hace que uno venga a trabajar feliz”, agregó Coleffi.
Quizás uno de los puntos más importantes de Bahía Basket tenga que ver con los juveniles, ya que en los dos primeros años de competencia, los jugadores jóvenes no vieron muchos minutos de acción. En esta temporada, Miéres, Redivo y Torres, tres jugadores nacidos y criados basquetbolísticamente en Bahía Blanca, tendrán el desafío de ganar tiempo de acción entre los profesionales.
“Primero hay que hacer un análisis exhaustivo y ver qué nos pueden dar los chicos. Siempre dije que aquel que tenga la personalidad suficiente para entrar y producir cosas, tendrá un lugar para que yo lo tenga en cuenta. De todos modos, van a tener que trabajar mucho porque ganarse un minuto en un equipo de LNB no es fácil. Van a tener que ser inteligentes para saber qué necesitamos de ellos y el que lo logre tendrá la oportunidad de demostrarlo”.
