La jornada de trabajos que cumplió ayer el plantel de Bahía Estudiantes fue muy positiva porque Ariel Zago y Juan Espil ratificaron que están en condiciones de jugar los partidos de mañana y el martes, que marcarán el cierre de la segunda fase de la Liga Nacional.
Después de sufrir una lesión discal en su nivel más alto en el cotejo ante 9 de Julio (Río Tercero), el ala-centro chaqueño pudo efectuar en la víspera trabajos en posición de juego durante 8 minutos. Y hoy intensificará la carga llevándola a 12 minutos de trabajo en su puesto real, como paso preliminar a tener acción mañana frente a Quilmes de Mar del Plata.
La recuperación de Zago se está logrando en menor tiempo del estimado, que era de un mes. Para ello el jugador trabajó dos veces por día en las últimas dos semanas. Fue clave que a la tarea conjunta del kinesiólogo Leandro Amigo y del traumatólogo Guido Giuliano se sumara la asesoría del especialista Luis Torrego Alonso.
Es uno de los nueve profesionales certificados en el país para llevar a cabo el método McKenzie, uno de los que se aplican en la NBA.
Por su parte Espil entrenó con normalidad, ya recuperado de una osteocondritis en la rodilla derecha y participará del encuentro de mañana en el Casanova ante los marplatenses. El choque comenzará a las 21 y será arbitrado por Fabricio Vito y Julio Dinamarca.
La última presentación estudiantil en la segunda fase será el martes, en horario similar, pero frente a Lanús. Controlarán Pablo Estévez y Oscar Martinetto.
