Si bien estuvo vestido de jugador y sentado en el banco, Pepe Sánchez no gozó de minutos anoche a raíz de una fisura costal que lo tiene a maltraer.
“En la semana voy a seguir trabajando y el viernes seguramente jugaré”, adelantó el base después de la derrota. El que lo vio como un plateísta más fue Juan Espil, con un golpe en la rodilla derecha. La vuelta del tirador se demoraría unos días más.
Sin criterio. Muchas dudas generó el arbitraje de Fernando Sampietro y Julio Dinamarca. Que quede claro: la dupla arbitral no incidió en el resultado final del partido. Lo que sí hubo malestar general --también en un par de allegados a La Unión-- a partir de la utilización de un criterio difícil de comprender.
Después de una reunión entre la comisión técnica y los entrenadores, hubo acuerdo para modificar el criterio, siendo menos permisivos en los contactos, básicamente, sin pelota. Lo cierto fue que anoche, Sampietro le erró al pitarle falta técnica a Ricky Sánchez por tomar la pelota y apoyarla con enojo en el parquet tras un costoso doble, y Dinamarca le inventó otra a Lewis cuando chocó al propio boricua en su intento por taparlo. Habrá que acomodarse rápido, para que los jugadores también puedan hacerlo.
